Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- Cada 29 de julio se conmemora el Día del Mal de Amores, una ocasión que invita a reflexionar sobre el impacto emocional de las rupturas. Enfrentar una pérdida amorosa puede ser un proceso complejo, pero, a continuación, te presentamos algunos consejos para sanar y seguir adelante con firmeza en tu vida.
Los expertos en psicología han estudiado en profundidad el fenómeno del "corazón roto" y han descubierto que el dolor emocional puede manifestarse físicamente. Las personas que atraviesan una pérdida amorosa pueden experimentar: dolores en el pecho, dolores de cabeza, fatiga e incluso problemas gastrointestinales.
Consejos ante una pérdida emocional
El primer consejo es permitirte “sentir tus emociones” y no querer evadir lo que ha pasado. El psicoanalista Sigmund Freud decía: Las emociones reprimidas nunca mueren, son enterradas vivas y saldrán de la peor manera. Por lo tanto, es importante permitirse sentir todas las emociones, ya sean emociones tristes, enojadas o confusas, para avanzar en el proceso de curación y no generar problemas en tu cuerpo.
En segundo lugar, “buscar apoyo”, es importante tener alguna persona en la cual confíes y pueda ser un apoyo mientras estás viviendo el proceso de duelo. Puede ser un amigo, un familiar, pero lo más recomendable es tener un apoyo profesional de la salud mental, quien tenga la experiencia para apoyarte en comprender tus emociones y ayudarte a salir de ahí.
Otro consejo es: “cuidar tu salud”, asegurándote de cuidar tu cuerpo y tu mente. Es normal que este proceso sea agotador emocional y físicamente, por lo tanto, es de suma importancia buscar la manera de comer bien, hacer ejercicio regularmente y dormir lo suficiente. Cuando es difícil conciliar el sueño es recomendable hacer ejercicios de respiración.
También es importante, “aceptar la ayuda”. A veces es normal que nuestros amigos o familiares quieran ayudar, pero no saben cómo hacerlo e incluso generar comentarios no muy positivos, sin embargo, a pesar de ello, hay que aceptar su ayuda e incluso comentarles cómo pueden apoyar, por ejemplo, cocinar una comida o hacer algún recado.
Por otro lado, es fundamental “tener paciencia consigo mismo”, en una expresión de William Shakespeare mencionaba: ¡Qué pobres son aquellos que no tienen paciencia! ¿Hay herida que sane de otra manera que no sea poco a poco?. Por lo tanto, la recuperación de un mal de amores no sucede de la noche a la mañana, date tiempo para procesar tus sentimientos.
Una mala ruptura amorosa te hará pasar por cinco etapas de duelo. Las cinco fases del duelo son: negación, ira, negociación, depresión y aceptación. En la fase de negación, las personas tienden a negar la realidad de la situación y suelen sentirse confundidas o aturdidas. En la fase de ira, pueden sentirse enojadas por el acontecimiento y buscan a alguien o algo a quien culpar.
En tanto la fase de negociación, la persona intenta hacer acuerdos para cambiar la situación. En la fase de depresión, las personas pueden sentirse tristes, desesperadas. Por último, en la fase de aceptación, es cuando las personas aprenden a aceptar la realidad de la situación y a avanzar con su vida. Es importante mencionar que no todas las personas experimentan estas fases en el mismo orden.