Morelia, Michoacán.- Fueron dos mil pruebas de ADN las que se aplicaron el pasado fin de semana a familiares con personas desaparecidas en Michoacán, de ese número el 80 por ciento no ha interpuesto una denuncia por miedo a represalias, indicó la diputada del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), Margarita López Pérez.
La también madre buscadora de su hija Yahaira Guadalupe Bahena López, desaparecida el 13 de abril de 2011 en Oaxaca, informó que el evento realizado a las afueras de la 21 Zona Militar en Morelia el pasado fin de semana rebasó las expectativas, ya que la Fiscalía General de la República (FGR) sólo había aprobado 500 pruebas de ADN, sin embargo, de último momento se solicitaron otras mil 500 más.
En entrevista, López Pérez evidenció que se decidieron aplicar las pruebas de ADN a los familiares con personas desaparecidas en Michoacán, porque además de que en la Fiscalía se realizan de forma equivocada para retrasar los procesos, también se ha detectado que a través de un número de la FGR llaman a las personas que buscan un familiar para decirles que pueden pasar por el acta de defunción para estafarlos y cobrar dinero a las víctimas indirectas de las desapariciones.
Con esta colecta de muestras, se espera que puedan identificar a las más de 70 osamentas encontradas en la fosa clandestina en la comunidad de La Parota en el municipio Tacámbaro.
De ese número, López Pérez denunció que sólo un 20 por ciento ha presentado la denuncia ante las autoridades correspondientes, ya que muchas de estas personas tienen miedo a las represalias o que puedan ser asesinadas como sucedió con los padres Griselda Armas y su esposo Marcos Valdovinos , quienes se encontraban buscando en Tacámbaro a su hijo, Diego Yahir V. A. de 16 años, desaparecido desde el 1 de septiembre de este año.
Según la madre buscadora, las familias que acudieron a la convocatoria eran provenientes de los municipios de Tacámbaro, Villa Madero, Pedernales, Nocupétaro y Pátzcuaro.
Al respecto, indicó que este tipo de jornadas se continuarán realizando en Morelia, pero también en otros municipios de la entidad para que más familiares puedan encontrar a sus desaparecidos.
“La realidad la sabemos nosotros, que realmente hay una situación preocupante de los desaparecidos. Yo sigo amenazada por grupos criminales, que me dicen que ya le pare y que salga de Tacámbaro, pero vamos a continuar hasta encontrar el último resto humano de la fosa clandestina”, subrayó.
