Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- El exsecretario de Cultura de Michoacán, Jaime Hernández Díaz, durante el periodo 2008-2012, aseguró que la dependencia debe contar con un perfil adecuado para ya evitar los constantes cambios que ha sufrido dicha área gubernamental desde 2015, con el constante relevo de titulares, siendo el más reciente el de Gabriela Molina Aguilar, quien dejó el cargo para tomar la titularidad de la Secretaría de Educación del Estado.
“Que sean personas muy sensibles, muy abiertas, con un criterio de gran tolerancia a las diversas expresiones en el campo de la política, con gran tolerancia a los fenómenos de la gran diversidad que expresa la vida cultural de Michoacán y de nuestro país. Yo creo que cualquiera que llegue deberá tener ese criterio y punto de partida”, dijo en entrevista.
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Agregó que el perfil no es tan importante, ya sea artista, abogado u otra profesión, lo que sí debe tener es la capacidad de escucha, “no tendría por qué ser algún perfil específico pero sí quien llegue, debe tener una característica fundamental: una actitud plural, abierta, sensible y saber escuchar”.
Pese a esta declaración, coincidió en un punto con el grupo creado meses atrás por directores de festivales, asociaciones civiles, artistas y gestores, quienes solicitaron al propio gobernador y presidente municipal de Morelia, colocar en el puesto a gente que sepa del ámbito y sobre todo de la gestoría internacional, privada y ante la misma federación.
“Yo creo que en efecto, los funcionarios de cultura tienen que ser grandes gestores, sin duda. Me parece que ese es otro quehacer y una dinámica de la vida cultural del país y del mundo”.
Finalmente, Hernández Díaz, quien de 1996 a 2002 también encabezó el Instituto Michoacano de Cultura, hoy la Secretaría de Cultura de Michoacán, explicó que este cambio en la Secum debió tener una razón que llevó al gobernador Alfredo Ramírez Bedolla a tomarla.
“Yo soy muy respetuoso de las circunstancias que prevalecen en el gobierno del estado, de la propia política que desarrolla el gobernador por el que tengo un gran respeto también. Debieron de haber existido razones que ponderó para hacer las modificaciones que juzgó convenientes, y desde luego sin cambios que obedecen a sus criterios”, concluyó.
