Villamar, Michoacán.- Un mínimo de 16 reses han sido robadas en diversas comunidades de este municipio en los últimos ocho días de acuerdo a los datos proporcionados por Martín Farías quien forma parte de la Asociación Ganadera Local, pese a que se han presentado las quejas correspondientes no han tenido respuesta.
Dijo que los robos de estos animales se han dado principalmente en las zonas de pastoreo que limitan con los municipios de Jiquilpan, Tocumbo y Chavinda, lugares que se encuentran alejados de la zona de rondines de la policía municipal.
Cuestionado sobre las medidas de seguridad que toman los propios ganaderos, reconoció que regularmente se practica el pastoreo y el acorralamiento de las reses, esto es, no se guardan propiamente en establos sino en corrales fueran de las zonas habitacionales y regularmente de noche es cuando ocurren los robos.
La persecución de estos delitos se dificulta debido a que muchos de los ganaderos carecen de los documentos necesarios para probar la propiedad de los animales, ya que incluso algunos ni siquiera han realizado el registro de sus fierros o marcas ante la Secretaría del Ayuntamiento y como consecuencia no cuentan con las facturas de los animales.
Otros ganaderos, principalmente de la zona sierra del municipio de Jiquilpan, han señalado su intención de formar guardias de vigilancia en la zona limítrofe con Jalisco ya que, intuyen, es para esa entidad que se traslada el ganado robado.
No existe todavía una versión por parte de las autoridades policiacas de ambos municipios sobre este delito, incluso se carece de estadísticas que indiquen la gravedad del asunto “la verdad es que cada día estamos con el temor de que nos roben animales” dijo Farías Alejandre quien dijo que los trabajadores que cuidan los hatos en las horas de pastoreo tienen indicaciones de no resistirse a los robos “Ya estamos resignados pero no es lo mismo perder 15 o 20 mil pesos por una vaca a que le pase algo a alguno de los vaqueros”.
Señaló que a través de las diversas organizaciones de ganaderos de la región se ha pedido incluso a la Guardia Nacional reforzar los trabajos de vigilancia en las zonas alejadas de los centros de población, sin embargo hasta el momento estas acciones no han reducido el índice de robos.