La enfermedad de Párkinson fue descrita por primera vez por el médico James Parkinson en 1817, desde entonces su estudio y tratamiento ha ido en aumento, aunque aún se desconocen algunas de sus causas.
De acuerdo a la Parkinson's Foundation, agrupación internacional que se encarga de recaudar fondos para la atención de pacientes y dar a conocer los últimos avances en el tratamiento de esa enfermedad, se sabe que la también llamada parálisis agitante es un mal neurodegenerativo crónico caracterizado por el movimiento lento, rigidez, temblor y pérdida del control postural.
La enfermedad, también llamada mal de Parkinson, parkinsonismo idiopático, parálisis agitante o simplemente párkinson, se debe a un déficit en la secreción de dopamina, hormona liberada por las terminaciones nerviosas.
El día 11 de abril se conmemora en todo el mundo el Día del Párkinson, esa fecha fue instaurada por la Organización Mundial de la Salud con la finalidad de aumentar el interés por conocer más sobre esta enfermedad que aqueja al 2 por ciento de la población mayor de 60 años de edad, da acuerdo a la mencionada fundación.
En algunos casos el diagnóstico ocurre cuando los síntomas son muy notorios; sin embargo, es posible identificar signos que nos alerten sobre esta enfermedad.
Lo mejor siempre es acudir a un neurólogo capacitado para tratar la enfermedad de Parkinson; de ser posible, un especialista en trastornos del movimiento. A continuación te mencionamos las principales señales de este mal.
1.- Encorvamiento
El párkinson es un trastorno del movimiento que desencadena alteraciones en la función cognitiva, depresión, dolor y alteraciones en la función del sistema nervioso, pero también provoca fallas en el control automático para mantenerse erguidos y ocasiona una postura alterada.
2.- Mareos
De acuerdo a la Parkinson's Foundation, se pueden presentar mareos debido a una caída en la presión arterial, la cual puede ocurrir en las personas con daños en el sistema nervioso automático.
También te podría interesar: Parkinson, enfermedad neurológica con mayor crecimiento
3.- Hipomimia facial
Se trata de manifestaciones de rigidez en los músculos de la cara, es decir una reducción de expresiones faciales; en la mayoría de las personas les resulta difícil que otros interpreten su estado de ánimo debido a ese síntoma. Un especialista en problemas del lenguaje podría enseñarle ejercicios faciales para mejorar su salud.
4.- Problemas de habla
Los síntomas más notorios en los pacientes, de acuerdo a la Parkinson's Foundation, son los que están relacionados a los músculos de la cara, como masticar, comer, hablar o tragar; la rigidez tiende a aumentar a medida que avanza la enfermedad y por consiguiente los problemas para articular palabras. La mayoría de las personas con ese mal tienden a comunicarse cada vez con menos volumen y reducen su voz notoriamente.
5.- Estreñimiento
Cada persona suele defecar una o dos veces al día, mientras que otras lo hacen de tres a cuatro veces por semana; sin embargo, pacientes con la enfermedad presentan problemas en sus evacuaciones intestinales ocasionados por el medicamento que toman para controlar los síntomas del párkinson y debido a las alteraciones que tienen en los músculos lisos del aparato digestivo.
6.- Pérdida de olfato
De acuerdo a la Parkinson's Foundation, un síntoma notorio es la pérdida del olfato, ya que la mayoría de las personas con párkinson tienen dificultades para percibir olores como el del plátano, pepinillos en vinagre o canela; especialistas recomiendan acudir al médico cuando ocurra esa señal.
También te podría interesar: Estas son las enfermedades más comunes del cerebro ¿se pueden prevenir?
7.- Modificación en la escritura
Algunas personas con párkinson suelen reducir repentinamente el tamaño de las letras en su escritura. En la mayoría de las personas ese cambio es normal con el paso del tiempo, pero es extraordinario cuando ocurre repentinamente y de forma involuntaria.
8.- Temblor
El síntoma más relacionado con el mal del párkinson es el temblor en dedos, manos, mentón y extremidades; esa reacción es común después de realizar algún ejercicio, si se ha sufrido una herida o como reacción secundaria a algún medicamento, pero si ocurre sin esos detonantes lo mejor será acudir al médico.
