Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- Morelia se ha convertido en una ciudad de paso para el tráfico ilegal de diversas especies de animales en México, muchas de las cuales provienen del interior de Michoacán y otras más de estados como Guerrero o Oaxaca, informó el director del Zoológico de Morelia, Julio César Medina Ávila.
En entrevista, dijo que durante el 2022 el zoológico recibió 206 especies que fueron decomisadas por la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), entre las que destacaron tucanes, loros, pericos verdes, tortugas payaso, iguanas verdes y negras, así como cardenales y hasta quetzales.
Indicó que alrededor de 20 a 30 especies que se comercializan están en peligro de extinción, por lo que exhortó a la población evitar comprar animales con intermediarios, mencionó además que la mayoría de estos animales ya cuentan con un grado alto de enfermedades.
Comentó que la mayoría de los animales que son vendidos tienen como origen el norte de nuestro país, en donde la mayoría de las especies no suelen encontrarse debido a las condiciones climatológicas que se tienen, por lo que son blanco perfecto para su captura y venta.
"Este año tuvimos un gran número de especies decomisadas por la Profepa, a muchas de ellas se les dio el tratamiento necesario para que volvieran a su hábitat natural. Nosotros nos hacemos cargo porque ya vienen en muy mal estado los animales, pero la verdad es que Morelia se ha convertido en una ciudad de tránsito para el tráfico de estas especies", comentó.
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De acuerdo a información proporcionada por el Centro de Atención Animal municipal, en el último trimestre del año pasado se realizaron cuatro operativos de decomiso en donde se resguardaron alrededor de 32 ejemplares como perros, gatos, iguanas, geckos, cocodrilos, por mencionar algunos.
Los espacios en donde se han encontrado la venta de animales exóticos y fauna en general es el auditorio municipal, zonas específicas de Altozano, Santa María y Servicentro, por lo que las autoridades municipales atienden puntualmente dichos espacios para evitar la comercialización de los animales.
