Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- Un juez de control ratificó el ingreso del Ministerio Público a un domicilio particular para buscar dos objetos que Hanna Paulina declaró haber escondido por orden de Diego Urik, el presunto asesino de la moreliana Jessica González en septiembre del año pasado.
La Fiscalía del Estado detalló que el pasado 26 de febrero, a las 20:00 horas, entrevistó a Hanna Paulina, quien se encuentra en calidad de imputada y confesó que Diego Urik le pidió, de forma muy agresiva, que ocultara una chamarra café y un hacha.
Con esa confesión, el Ministerio Público pidió permiso a la mamá de Hanna, la señora Marta Angélica, para ingresar a su hogar y buscar dichos objetos.
Alrededor de las 21:45 horas del mismo día, un grupo de agentes del MP y peritos llegaron al hogar de Hanna, y con la autorización expresa de la mamá, entraron para realizar la búsqueda, la cual duró entre 40 minuto y una hora.
Los objetos fueron localizados detrás de un sillón de la sala, en un espacio donde se encontraban otros, por lo que no se podían ver a simple vista, dijo la señora Marta Angélica, quien compareció en la audiencia y fue interrogada por ambas partes.
Al momento de encontrar los objetos, los peritos tomaron fotos, hicieron pruebas de huellas dactilares y de luminiscencia. El hacha es color gris y tiene una longitud de 92 centímetros.
La defensa de Diego argumentó que la Fiscalía había entrado de manera ilegal a la casa, ya que la mamá de Hanna no es la propietaria, sino el abuelo. Además, señaló que por ello se violaban derechos humanos de Hanna, ya que su defensa no estuvo presente ni en la investigación en el hogar ni en la audiencia
El juez de control desestimó dichos argumentos, ya que la señora Martha y sus hijos llevan cuatro años viviendo en ese lugar, bajo un contrato de palabra con el abuelo de Hanna. Además, acotó que la mujer había asistido a la audiencia con plena libertad, asegurando que dio la autorización para que entrara el MP.
Sin embargo, advirtió a la Fiscalía que de presentar a Hanna ante un juez e iniciar un proceso, su defensa podría utilizar esto en contra, toda vez que no estuvieron presentes, como lo dijeron los defensores del joven imputado.
Cuando se leyó la declaración de Hanna, Diego Urik comenzó a tronar sus dedos, y no dejó de tocar su cara durante el interrogatorio de la señora Marta Angélica.
Así el juez ratificó como legal el ingreso de la fiscalía a la casa de Hanna, los resultados de los análisis hechos a la chamarra y al hacha serán presentados durante la audiencia intermedia el próximo 1 de abril.
