MORELIA, Mich.- (OEM-Infomex).- Si bien el secretario de Finanzas y Administración del Gobierno de Michoacán, Carlos Maldonado Mendoza, informó que al día de hoy no se tiene visualizado endeudar al Estado con la contratación de algún crédito bancario, no descartó esa posibilidad, ya que las condiciones económicas de la entidad se encuentran al límite, pues de no resolverse la federalización de los servicios educativos en un plazo menor de 15 días no se contaría con recursos suficientes para cumplir con el pago de la segunda quincena magisterial del mes de junio.
Tras la reunión privada que este viernes sostuvo el funcionario estatal con los diputados Arturo Hernández Vázquez y Norberto Antonio Martínez Soto, ambos presidentes de las comisiones de Hacienda y Presupuesto, respectivamente, explicó que pese a haberse ratificado la calificación triple B estable a las finanzas del Estado, adquirir un nuevo empréstito sería complicado pues si bien a la fecha se ha cumplido a cabalidad el pago del servicio de los seis créditos que mantiene el Estado, y se pudiera afectar el manejo financiero estatal.
Sin negar la necesidad de mayores recursos para rellenar el déficit financiero de Michoacán el cual ronda los cinco mil millones de pesos por año, Maldonado Mendoza secundó la postura del gobernador, Silvano Aureoles Conejo, de llevar al límite la situación económica estatal, es decir, cuando el Gobierno de la República dé una respuesta al proceso de atracción de los servicios educativos, señalando que de atraer educación básica, pues hay el planteamiento de que sería progresiva, tendrían al menos un respiro de mil 500 millones de pesos anuales.
“Quisiera llevar al limite la decisión del señor gobernador de plantear al Congreso del Estado y someter a su consideración la posibilidad der algún empréstito porque pues no hay semana que él no esté haciendo una gestión directamente con la Federación”, agregó, al afirmar que la mejor apuesta del Gobierno será la de pedir “en buen plan” la federalización de la nómina, pese al riesgo existente de que el presidente de la República se pueda retractar.
Indició que aun cuando el Gobierno del Estado aplicó recortes a distintas unidades programáticas presupuestales por el orden de los dos mil millones de pesos, estos fueron distribuidos hasta el mes de diciembre para incluso cubrir otros pendientes de la administración pública estatal.
Estimó pese a que el semáforo sobre el comportamiento financiero de Michoacán está en color verde, después de que desde el año 2000 al 2017 estaba en rojo, el monto al que pudieran acceder sería de apenas mil 500 millones de pesos, frente a los más de cinco mil que se requieren para evitar una crisis política y social en Michoacán, principalmente por incumplir en el pago de los trabajadores de la educación.
Por su parte, Norberto Antonio Martínez Soto, diputado local perredista y presidente de la Comisión de Programación, Presupuesto y Cuenta Pública, inclinó su postura a que la entidad solicite el aval del Congreso para contratar un nuevo crédito pues aun con el costo política para la administración estatal, advierte es más grave volver a vivir un escenario de crisis económica y social en la entidad si el magisterio retoma acciones como el cierre de vías de comunicación como las férreas.
En su oportunidad, Arturo Hernández Vázquez, presidente de la Comisión de Hacienda y Deuda Pública, además de celebrar la reunión, mantuvo su postura de que no se contrate ningún empréstito, adelantando que de ser necesario armarían un frente desde el Congreso y en conjunto con el gobernador Aureoles para que la Federación cumpla con el compromiso asumido con el pueblo de Michoacán para atraer los servicios educativos.