Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- El coordinador del Sistema Penitenciario de Michoacán, Ignacio Mendoza Jiménez, aseguró que en el penal de Mil Cumbres ya no hay espacio para albergar en condiciones dignas a los 164 detenidos originarios de la comunidad de Tiamba, en Uruapan, a quienes se les vincula con la organización Pueblos Unidos.

En entrevista, el funcionario recordó que ese Centro de Readaptación Social ya estaba rebasado en un 32 por ciento, por lo que la llegada de nuevos internos hace todavía más compleja la convivencia.

El cambio en el modelo de justicia penal originó que la Federación sólo tenga un centro de reclusión, por lo que todos los imputados de delitos federales son ingresados en la capital del estado y por lo tanto hay una mala distribución entre los 11 que existen en la entidad.

Ante ese panorama, Mendoza refirió que ahora toca esperar que transcurra la duplicidad de término solicitada por la defensa de los detenidos, es decir, un periodo de 144 horas en las que se pueden agregar elementos a su favor. Una vez que eso pase, el juez tendrá la decisión si continúan recluidos, pero por lo pronto deben permanecer en Mil Cumbres al ser un delito grave que implica prisión preventiva oficiosa. “Si se quedan, ya veremos a dónde los mandamos”, dijo el funcionario.

En números absolutos, se calcula en 500 los internos que representan ya una sobrepoblación en los penales de Mil Cumbres y el de Alto Impacto. En este escenario, Mendoza Jiménez no quiso adelantar a cuál de los otros nueve centros de readaptación podrían ir las 164 personas en caso de que se concrete su encarcelamiento, y sólo se remitió a decir que lo están estudiando y en todo momento se buscará respetar sus derechos humanos.