Morelia, Mich (OEM-Infomex).- Luego de que fuera cancelado el espacio del Taller de Gráfica de Clavijero, las artistas y gestoras que lo operaban, Geraldine Guillén e Isela Mora, trasladaron el proyecto a otra sede, en la calle Eduardo Ruiz 456, donde volverá a abrir la tarde de este jueves, solo que con otro nombre: el taller de gráfica Errante.
El Taller continuará las funciones que tuvo cuando estuvo dentro del Centro Cultural Clavijero (CCC), como son talleres de gráfica, renta del espacio para permitir que otros artistas vayan a trabajar e incluso habrá servicio de café y alimentos, comentó en entrevista exclusiva Geraldine Guillén.
“Decidimos ponerle taller de gráfica Errante por eso de que ha andado de un lado para otro, la reapertura viene también con una exposición colectiva con obra de alumnos que hemos tenido y de maestros como el michoacano Marco López Prado y el oaxaqueño Damián Lescas”. En esta muestra colectiva, que no tiene un nombre como tal, podrán verse 15 piezas realizadas por 12 creadores, mismas que estarán montadas por espacio de dos meses.
Por otra parte, el taller de gráfica Errante está en una sede muy cercana a su anterior casa, en la calle Eduardo Ruiz, lo cual también fue parte de los objetivos de ambas gestoras. “Estuvimos buscando algo céntrico porque ya estuvimos en la periferia, en la Casa Zalce -espacio donde el taller inició antes de llegar a Clavijero- y para algunas personas era difícil llegar, pero es más fácil que todos lleguen al centro, entonces nuestra idea fue encontrar algo cercano a donde estábamos antes y por suerte encontramos esta casa”.
El proyecto en su versión anterior, llamado Taller de Gráfica de Clavijero, fue cerrado a inicios de este enero por disposición de la actual Secretaría de Cultura de Michoacán (Secum).
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El proyecto nació en la Casa Zalce y se mudó a Clavijero en noviembre de 2020, teniendo entonces el cobijo de la administración estatal anterior, pues tuvo apoyo de los antiguos titulares de la Secum, Claudio Méndez y Sandra Aguilera Anaya y, a decir de las gestoras, los funcionarios actuales buscaron apropiarse del proyecto. “Es extraño que pidieran se desocupara tan rápido porque decían tener algo en puerta, pero al pasar se ve que no hay nada, no se ve iniciativa o propuesta de que vaya haber algo”.
Pero el proyecto logró generar un tejido social local, pues luego del cierre en Clavijero artistas y estudiantes han otorgado a Guillén y Mora apoyo para la mudanza y también para el acondicionamiento del nuevo espacio: “nosotros invertimos en algunas cosas, como lámparas, porque lo demás ya lo teníamos, para las mesas compramos el material y el maestro Marco López las ensambló; nuestros amigos y la gente nos ayudaron desde cargar, empacar, a pintar, la comunidad que se generó fue la que nos ayudó a iniciar acá”.
Geraldine Guillén comentó que en el nuevo sitio, se tendrán los mismos talleres que ofrecía anteriormente, “uno es el permanente de grabado en relieve para principiantes, que será con tres grupos los días lunes, miércoles y viernes, martes y jueves; dos por la tarde y uno por la mañana; también otros grabadores podrán venir a rentar el espacio para venir a trabajar, por día o por mes y serán los mismos costos, que son 50 pesos por cuatro horas y 380 mensuales; además abriremos talleres de dibujo y pintura, aunque de esos todavía no hay fechas”.
